jueves, 16 de enero de 2020

CARTA ABIERTA AL DICTADOR FUGITIVO


Hace más de 20 años me dio la impresión de que eras una persona violenta y peligrosa. Nunca fuiste capaz de debatir ni de ceder ante nada ni nadie. La vida te dio los medios para imponerte, casi siempre sin razón, y hacer lo que te diera la gana.

A título de “dirigencia” te atribuiste derechos sobre la vida de las personas, y jamás tuviste que responder por los crímenes que cometiste. El haber ordenado matar te hace más que solamente asesino. Eres un cobarde, porque ni siquiera fuiste capaz de hacer las cosas por ti mismo, y estás convencido de que la ley no te alcanzará.

Fuiste ingenuo e ignorante, lo que te llevó a equivocarte mucho y cometer errores y delitos a cada paso. Después de todo este tiempo, ya no eres ingenuo, pero sigues siendo ignorante.

Los presidentes anteriores a ti y la presidenta actual son “excelentísimos”, y más a allá de tu ignorancia respecto al significado de este apelativo, sin hacer mucho, ellos lo merecen. Tú no lograste nunca algo así.

Añoras no haber tenido milicias armadas a las que pudieras mandar a matar. Te quedaste solo, sin policía ni fuerzas armadas, por tus propios errores y malas decisiones. El presidente es el Capitán General de las FFAA. Tú no pudiste serlo, ni siquiera después de 13 años como Presidente. Ya te diste cuenta que no es cuestión de “comprar”, con dinero que no es tuyo, lo que solo el honor puede conseguir?

Hay algunas cosas que ya deberías entender. Las mujeres no son objetos, los hijos no son accidentes, la lealtad no se compra, la amistad no es interés material, la dignidad se ejerce y no se cacarea, el respeto es de ida y vuelta, la ética existe, especialmente cuando nadie te está mirando. Son cosas que nunca tendrás el poder de cambiar.

Debes darte cuenta de que ya no puedes mentir con la impunidad de antes. Los bolivianos ya no te creen como antes. Ya se acabó tu tiempo, y ahora solo te toca esa misión a la que tanto miedo le tienes y siempre tuviste. Debes rendir cuentas y afrontar las consecuencias de tus actos. Tendrás que hacer frente a todo lo que decidiste “meterle nomás”. Tus abogados no pudieron “legalizar” como querías. Las leyes están por encima de todos.

Permanentemente reclamas ser víctima de racismo y discriminación. Te explico: es imposible ser racista con quién es de la misma raza, y somos la mayoría en Bolivia. La discriminación….es otro tema. Eres y serás siempre discriminado. Es natural. Es difícil encontrarte como “igual” después de todo el daño que le has hecho a esta patria que tanto amamos los bolivianos.

Por favor, deja de hablar de democracia, de estado de derecho, de justicia social, de derechos humanos, y especialmente de PAZ. Son conceptos desconocidos para ti, y no creo que los 30 años de “descanso” que te esperan, te alcancen para comprenderlos.
Ya no te corresponde emitir un discurso el 22 de Enero. Ya no eres Presidente, por que renunciaste y te escapaste a México.

Por último, no seas abusivo con los países que te dan asilo. No seas cínico. Y deja de amenazar con que vienes a Bolivia y le pones fecha y agenda para la ocasión. Sabemos perfectamente que no eres ningún valiente, y que no vienes simplemente porque te aterra pasar una noche en una celda. No sabes si estará ahí alguien a quien hayas hecho daño.

Si vas a volver a territorio nacional, se hombrecito y ya. No juegues con la paz social y la tranquilidad de la gente. Desde que te fuiste vivimos mejor. Ya no queremos volver a la tensión y las amenazas, pero que ni se te ocurra pensar que tenemos miedo. Ahora tenemos claro que queremos y que no aceptamos. Lucharemos si es necesario. Ya no es un tema de visión política o ideológica. Para eso tenemos democracia e iremos a elecciones en Mayo. Nuestra lucha será contra la delincuencia. Quedas advertido.


Hector Castro G.  *  16 Enero 2020

No hay comentarios:

Publicar un comentario