LA VERDAD
NOS HARÁ LIBRES,
Titula la
columna de @Amalia Pando de la fecha, a continuación mi comentario al respecto:
Las medias
verdades no son verdades. En este caso solamente llevan a confundir a su
audiencia, y mermar cada día más la
credibilidad que supo cultivar en años de trabajo.
Don Yerko
Garafulic tiene razón. Usted no puede pretender, a título de “sentido común”
tener la razón, y contradecir las políticas del ministro, que es un
especialista muy renombrado, y del que no tiene ningún antecedente que le
permita dudar de su buena fe.
Pensé que
usaría su publicación de hoy para rectificar o enmendar lo que dijo en su
anterior entrega, pero nada. Usted debe informar, y por supuesto puede emitir
su opinión. El buen periodismo lo hace, y sabe de la gran responsabilidad que
conlleva el ser formadora de opinión.
No es
aceptable que juzgue, que sentencie, y que acuse subjetivamente y sin
fundamento a las autoridades nacionales y al representante de la OPS. No ha
respaldado en absoluto sus acusaciones, y tampoco ha rectificado nada.
Intentar
manipular la información solo para “tener razón” es incurrir en aún mayor
irresponsabilidad. Usted recomienda leer e informarse, a continuación comenta
varios casos y situaciones en tres países que son particularmente distintos a
Bolivia. Corea, Australia y Alemania cuentan con recursos infinitamente superiores,
tienen cultura de sobra para llevar adelante medidas y respetar
disciplinadamente las disposiciones de gobierno. Sus sistemas de seguridad
social y de políticas de desempleo son completamente diferentes, y el total de
su población forma parte de la tutela del estado. En Bolivia, a título de
informalidad, 80% de la población está librada a su suerte.
Está claro
que necesitamos, con urgencia, el testeo masivo para conseguir un seguimiento
oportuno al Covid-19. Lo que no está claro, excepto para algunos “iluminados”
es la forma en que se implementaría. La estructura del sistema de salud está
llena de huecos, funcionarios que sabotean cualquier iniciativa que venga del
ministerio. Una parte de la prensa tiene interés en denostar, defenestrar y
desprestigiar al ministro, a la Presidente, y al gobierno en general, como si
el tema político fuera pertinente frente a esta crisis. Hay sectores de la
población que son desinformados y manipulados a actuar en contra de todo lo
recomendado, sin considerar las consecuencias para la salud y la vida misma de
todos los bolivianos.
El testeo
masivo es solamente uno de los componentes en la lucha contra la Covis-19, pero
de ninguna manera es la solución a todos los problemas.
Porque no
acude a información de países un poco más parecidos. Talvez el enfoque cambie,
y se acerque algo más a la verdad, esa que nos hará libres. Ha visto la
tragedia en Ecuador? Vio los datos de la velocidad de diseminación del virus en
Perú? Tiene idea de la cantidad de pruebas realizadas en Perú? Cuál es la situación en países
centroamericanos o africanos?
Si su
actividad es la información, asegúrese de darla correcta y completa. Si además
usted decide opinar, entienda la responsabilidad que tiene formando opinión
ciudadana. Y si decide ser la luz que ilumine el camino de los bolivianos, al
menos sea objetiva y recurra al consejo que usted misma brinda. Tiene que leer
e informarse. Trate de entender la realidad que vivimos y aporte desde su medio
a remediar los grandes problemas a los que estamos sometidos en esta lucha que
nos compromete a todos. No son pocos ni menores: Senkata, Patacamaya, trópico
de Cochabamba, Montero, San Julián, zonas de mercado en cada ciudad, y muchos etcétera.
Tenga en
cuenta que todo lo que se haga en Bolivia parte de las decisiones y políticas
del gobierno. Si solamente nos dedicamos a formar opinión contraria, estamos
creando desconfianza e inseguridad en la población. Al mismo tiempo, estamos
creando frustración e impotencia pues este es el gobierno que tenemos, no podemos elegir otro,
y es el que hoy es responsable de la salud de todos los bolivianos.
La lucha
contra la pandemia es responsabilidad de todos. Cada uno desde su lugar tiene
la obligación de hacer su parte. El ciudadano de a pie está cumpliendo
mayoritariamente, el gobierno también hace razonablemente bien lo que debe
hacer. La prensa está aportando en su gran mayoría.
No es menos cierto
que hay ciudadanos que necesitan tomar conciencia del problema y corregir
algunas actitudes. El gobierno debe rectificar algunas situaciones y remediar
los problemas que existen, especialmente a nivel regional en los SEDES. Algunos
periodistas y medios necesitan repensar en su labor, y evaluar si aportan o
destruyen.
Nadie puede
lavarse las manos, especialmente si el resultado de sus acciones causa daño a
un propósito común, en el que hay vidas en juego.
Una crisis
tan complicada para los bolivianos requiere del aporte proactivo, constructivo
y positivo de todos. Las posibilidades de éxito se ven reducidas por algunas
consignas políticas saboteadoras, que pretenden hacer daño al gobierno y
terminan afectando a los bolivianos.
No entender
lo delicado de la situación, la precariedad sobre la que se tiene que ser
eficientes, las grandes limitaciones económicas e idiosincráticas, desde el
sitial de poder e influencia que tienen los medios, simplemente es hacerle un
flaquísimo favor a la colectividad.
A mayor
audiencia, mayor llegada y mayor rating, mayor la responsabilidad. Usted lo
sabe.
Hector
Castro G. * 23 Abril 2020
No hay comentarios:
Publicar un comentario